Para muchos chiguayantinos, el verano pareciera que empieza dos semanas antes y termina dos semanas después que en las comunas costeras de la provincia. Junto con Hualqui y Florida, cuentan con el clima más caluroso de esta zona, en comparación con las ciudades más cercanas al mar como Talcahuano, Penco o Tomé. No obstante, de acuerdo con expertos, Chiguayante cuenta con una condición especial a diferencia de las comunas con más ruralidad. Andrés Sepúlveda es profesor asociado del Departamento de Geofísica de la Universidad de Concepción, licenciado en Ciencias con mención en Física de la U. de Chile y Dr. en Oceanografía, de la Old Dominion University de Estados Unidos.

Indicó que «el clima en Chiguayante lo definiría como caluroso en verano, algo frío en invierno. Es más cálido, porque la ciudad está de entrada a lo largo del río y ya no se siente la influencia costera, así como el efecto atenuador del océano. Además, la ciudad está formada por pequeños valles que producen microclimas. Además, está el cerro que aísla partes de diversos sectores de la ciudad».
Luego de vivir 2 años en Concepción y los últimos 15 en Chiguayante, el experto dijo que «en esta comuna ganas un mes de sol y el verano empieza dos semanas antes y termina dos semanas después. Además, hay menos días nublados, porque la nubosidad llega a la parte costera. Por último, esta es una zona con menos humedad». Respecto a los riesgos de un clima cálido en esta ciudad, dijo que «claramente son los incendios forestales, debido a su ubicación entre el río y el cerro. Otro factor es la menor renovación de aire durante el invierno, producto del uso de la leña para la calefacción». Finalmente, dijo que «el beneficio es disfrutar un clima más agradable, más días de sol y menos humedad. Los niños sufren menos enfermedades respiratorias».