Con una historia de consecuencia y compromiso, la diputada María Candelaria Acevedo Sáez se presenta nuevamente a la reelección por el Distrito 20, reafirmando una convicción que ha guiado toda su trayectoria: la política debe servir a la dignidad humana, no a los privilegios.
Durante su gestión 2022–2026, hasta agosto de 2025, registra 50 mociones parlamentarias, 92 proyectos de resolución, 410 oficios fiscalizadores y 91 intervenciones en sala, consolidando una de las labores legislativas más activas del Congreso Nacional. Su acción se ha centrado en la defensa de los trabajadores, las mujeres, las personas mayores y las juventudes, impulsando cambios concretos que fortalecen el Estado social y democrático de derechos.

Entre sus principales iniciativas figuran la eliminación del tope a la indemnización por años de servicio, la protección de personas mayores y neurodivergentes; en el transporte público, la tipificación de la negación de violaciones a los derechos humanos y la garantía del agua como derecho humano. También ha promovido leyes que incorporan el enfoque de género en la pesca artesanal y el derecho a la lactancia materna en el trabajo. Además, fue parte de la Comisión Especial Investigadora por Robo de Madera, instancia en la cual se gestó la ley que sanciona específicamente este delito, impactando positivamente en regiones como la de Biobío y la Araucanía.
Acevedo es reconocida por su cercanía con mujeres cuidadoras y trabajadoras, a quienes ha acompañado en su demanda por reconocimiento y corresponsabilidad. Ha sido una aliada del Ministerio del Trabajo y comparte con la ex ministra, y hoy candidata presidencial, Jeannette Jara la visión de un Estado solidario que priorice la seguridad social, las pensiones dignas y el trabajo decente. Ambas representan una generación de liderazgos que han devuelto sentido ético y justicia redistributiva a la política pública chilena.

Desde su territorio y todo el Distrito 20— su presencia es constante: gestiona proyectos de salud, educación y transporte, dialoga con vecinos, sindicatos y organizaciones sociales, y actúa como un puente entre las comunidades y el Estado. Su mensaje es claro y directo:
“Chile necesita representantes que no se olviden de por qué están ahí. Yo quiero seguir trabajando por un país más justo, por un Estado que no le dé la espalda a su gente.”
María Candelaria Acevedo simboliza una política honesta, feminista y socialmente comprometida: una diputada que no habla desde la distancia, sino desde la vida cotidiana del pueblo que representa, demostrándolo con las más de 2 mil reuniones que ha sostenido con distintas organizaciones.
